El pintor francés Edgar Degas pintaba bailarinas muy a menudo. En su obra L’Étoile recoge un momento mágico, ese instante en el que el equilibrio de la bailarina es perfecto. En el cuadro ella se desmarca de los demás por su color, su dulzura, su seguridad. Por fin, tras su enorme esfuerzo, trabajo y constancia le ha llegado su momento de brillar, de ser la estrella. Ese es el momento al que ha llegado Daniela Yépez, la joven emprendedora ecuatoriana que está brillando en el sector del diseño de interiores en este país. No sorprende que su pintura favorita sea, precisamente, L’Étoile de Degas.
“Lo más importante es diseñar una emoción que identifique al cliente en cualquier rama creativa”
El pintor francés Edgar Degas pintaba bailarinas muy a menudo. En su obra L’Étoile recoge un momento mágico, ese instante en el que el equilibrio de la bailarina es perfecto. En el cuadro ella se desmarca de los demás por su color, su dulzura, su seguridad. Por fin, tras su enorme esfuerzo, trabajo y constancia le ha llegado su momento de brillar, de ser la estrella. Ese es el momento al que ha llegado Daniela Yépez, la joven emprendedora ecuatoriana que está brillando en el sector del diseño de interiores en este país. No sorprende que su pintura favorita sea, precisamente, L’Étoile de Degas.
En su segundo año de carrera en la Universidad Savannah College of Art and Design (SCAD), ya había elegido el logo y el nombre de la que sería su futura empresa, Daye Conceptual Design. Y con tan solo 22 años confiaron en ella por primera vez para conceptualizar y diseñar el interior de todo un edificio llamado Utopía. Aunque desde entonces no ha parado de trabajar en este rubro, nunca pensó que el éxito le llegaría tan rápido. El apoyo y confianza de sus padres han sido un importante pilar en todo este recorrido.
“Siempre tuve la influencia de mis padres. Mi papá dedicado a la construcción y el sector inmobiliario y mi mamá una adicta a la decoración. Desde pequeña me gusta la creatividad, el arte, teatro, canto, danza… Aunque nunca me consideré una persona artista o excelente en pintar o dibujar, siempre me gustó, y en el fondo sabía que esto era para mí. Así que cuando tenía 17 años sabía que el diseño sería the perfect match para exponer mi creatividad y complementar con la empresa de mi padre”
¿Cómo nace tu empresa Daye Conceptual Design?
“Desde pequeña mi papá me inculcó la importancia de la vida profesional y lo hermoso que es tener una empresa y generar trabajo, pero sobre todo divertirse. Así que, desde que entré a la universidad, mi objetivo fue siempre tener un estudio de diseño. En mi sophomore year empecé a crear mi logo junto a una amiga muy talentosa que estudiaba diseño gráfico. Ella vino con la idea de llamar mi marca Daye (Daniela Yépez), y me encantó como sonaba y lo pegajoso que era de cierta forma. Así empecé a colaborar con mi papá en sus proyectos inmobiliarios como la interiorista y desde ese punto nunca paré”
¿Cómo consigues tu primer proyecto en Ecuador?
“El primer proyecto que conseguí es utopía cuando tenía 22 años. Luego de mi experiencia en estados Unidos, volví a Quito con la idea de montar mi empresa Daye. Apenas llegué conocí a Eduardo Jaramillo, con quien, solo hablando en un almuerzo, concordé mucho en lo que es de verdad un concepto, no solo para las ramas creativas sino también empresariales. Llegamos a la conclusión de que el mismo concepto sirve para la parte creativa, financiera y empresarial. Todo vuelve al concepto. Él me llamó para ayudar en algunos proyectos grandes donde teníamos que encontrar la esencia para lograr mejores ventas”
¿Cómo es emprender?
“Emprender es un arte. Es una mezcla de emociones, un objetivo de vida, superar nuestros propios límites, ver cada derrota como una oportunidad de aprendizaje y mejorar. Emprender es hermoso, pero creo que debes tener muy presente que no es de un día para otro, sino un proceso. Lo más importante es poder gozar ese camino con aspectos positivos y a veces no tan positivos, pero nunca negativos. Y ultra importante: confiar y creer en uno mismo”.
¿Fue bien desde el primer momento?
“Tuve la gran oportunidad de contar siempre con el apoyo de mis padres, tanto económico como motivacional. La creación de Daye no se me ha hecho difícil como tal, porque todos los días trabajo como si fuera el primero; siempre con pasión. Creo que es muy importante to take it step by step y, sin darte cuenta, llegará el resultado”
¿Cuál es tu modus operandi cuando llega un nuevo proyecto?
“Antes de hacer un diseño de interior siempre hago un diseño conceptual, por eso mi empresa se llama Daye Conceptual Design. Mucha gente, cuando empieza a diseñar un interior, una marca, un edificio, etc. lo hacen sin tener un concepto fuerte atrás, simplemente lo diseñan. Y lo más importante es diseñar una emoción (concepto) que identifique al cliente, empresa o negocio en cualquier rama creativa.
Cuando llega un nuevo proyecto, lo primero que hago es buscar y entender la esencia de la persona, negocio o empresa. Es un talento poder encontrar esa esencia y eso creo que es donde Daye se diferencia. Nosotros encontramos esta esencia mediante las emociones, la abstracción y la simpleza de la objetividad y racionalidad”
¿De qué manera influye el diseño de interiores en los estados de ánimo de las personas, su forma de trabajar, de pensar y de vivir?
“En realidad, lo que va a influir en el ánimo de las personas, su forma de trabajar, de pensar, de vivir, de reaccionar a una marca, no es el diseño como tal, sino el concepto reflejado en el diseño de interior, en fashion, en marketing, en arquitectura, en productos, en muebles…”
¿En qué te inspiras a la hora de diseñar?
“Me inspiro mucho en la historia de cada cliente, negocio o empresa. Y luego busco abstracciones que me ayuden a ver esta esencia de una forma menos literal, como arte, fotografías, esculturas, poemas, etc.”
¿Tienes un lugar donde te gusta ir a reflexionar los nuevos proyectos?
“Me gustan los lugares con vista, buena música y, sobre todo, tengo que estar sola para poder encontrar el concepto”
Cuéntanos cómo es Daye Conceptual Design por dentro
“Somos una empresa pequeña: tres diseñadores de interiores, un diseñador gráfico y colaboro con una empresa que me ayuda con los 3D. También tenemos un equipo de construcción para poder ejecutar las obras.
Mi estudio de diseño lo que busca es, sobre todo, gente apasionada por lo que hace y con ganas de aprender. Nunca espero que salgan de la universidad sabiendo todo porque eso no es real. Me encanta compartir mis aprendizajes y aprender de mi equipo también. Lo más importante para mí es que todos estemos contentos, inspirados y así tener un excelente rendimiento y responsabilidad. Así que, si alguien quiere llegar a las 11 de la mañana o faltar un día, está perfecto siempre y cuando mantengamos la pasión y ejecutemos el trabajo debidamente”
De tus proyectos realizados hasta ahora, ¿cuál es tu favorito?
“Es difícil tener un proyecto favorito, puedo decir que son todos. Todos me han enseñado algo. Todos están altamente diseñados de acuerdo a su realidad y concepto. Los he disfrutado y todos quedaron relindos”
¿Cuál es tu proyecto soñado?
“Me encantaría realizar el concepto de un hotel boutique. ¡Siempre me han fascinado! Quisiera poder realizar su concepto y toda su estrategia creativa. Creo que es un sueño que podré lograr pronto”
Tu trabajo está revolucionando el panorama ecuatoriano. ¿Cuál es tu secreto? ¿Cuál es el diferencial de Daniela Yépez?
“Mi secreto es ser yo misma. Yo creo que cada diseñador tiene su propia forma de trabajo, y el secreto es encontrar tu método creativo. Cada diseñador trabaja diferente y eso es algo hermoso.
A muchos diseñadores les gusta diseñar en base a su estilo, y eso está bien, pero mi método es diferente. A mí me gusta diseñar en base a la esencia del proyecto, cliente, empresa o negocio y ese creo que es mi diferencial. Al trabajar así logro un diseño que trasciende funcional y emocionalmente”
¿Cuál es el siguiente paso?
“El siguiente paso es seguir con mis proyectos actuales, vivir el día a día. Me gustaría abrir el próximo año oficina en Miami, y poco a poco expandirme internacionalmente. Me encanta viajar y me gustaría que muchos lugares tengan un pedacito de Daye”
¿Cuál es tu apreciación del diseño de interiores en Ecuador?
“Creo que es un poco difícil para todos los creativos en Ecuador, ya que durante años la gente no ha estado acostumbrada a invertir en estas ramas. El trabajo creativo es muchas veces menospreciado. Esto es muy peligroso porque los diseñadores empiezan a trabajar sin motivación y por desesperación más que por pasión. He sentido que en estos últimos años ha mejorado la situación. (…) Muchos, como yo, han mantenido una disciplina de inculcar a la gente la importancia del diseño y, así, hemos visto que el diseño ha mejorado. Un buen ejemplo está en el sector inmobiliario, donde antes los acabados y la iluminación eran terribles y, ahora, se está mejorando”
Defínete en una frase
“Una persona muy decidida en lograr mis objetivos, pero manteniendo siempre el lado humano y romántico”
Recomiéndanos un libro
Hunger makes me a modern girlde Carrie Brownstein
¿Y una obra de arte?
L´Etoile de Degas