GEM: la nueva colección de Adriana Hoyos

Fotografía de Andrea Pérez Hoyos por Sebastián Cadena

Los materiales, colores y texturas de las joyas fueron la inspiración para la identidad de la nueva colección «Gem» de Adriana Hoyos. En esta entrevista con Andrea Pérez Hoyos podrás conocer más sobre la esencia, proceso y producto final de la propuesta.

¿Cómo ha sido el lanzamiento de la nueva colección Gem?

Se analizaron varios parámetros para realizar un lanzamiento global. Cuenca y Guayaquil fueron los puntos nacionales y a nivel internacional se hizo un evento en Miami con representantes de Dubái, Abu Dabi, Arabia Saudita, Panamá, República Dominicana, entre otros. La mayoría de nuestros representantes, más ocho estados del país, se concentraron en un solo lugar para este evento.

Fotografía de Andrea Pérez Hoyos por Sebastián Cadena

¿De dónde surgió la inspiración para utilizar gemas como elemento base en la creación de esta nueva colección?

Disfrutamos crear e inspirarnos para esta colección, nos cautivó mucho estudiar los diamantes y encontrar el corte cushion, que implementamos en varias piezas de la colección ya que es un cuadrado con las esquinas redondeadas. Así interpretamos lo que es una gema en los muebles e involucramos varios materiales como las cuarcitas y los metales para destacar en diferentes detalles.

¿Cómo describirías la esencia del diseño de Adriana Hoyos?

Adriana Hoyos tiene diseños atemporales, sofisticados y con muchos detalles. La calidad tiene una gran importancia, haciendo que colecciones nuevas puedan complementarse con colecciones antiguas.

Comedor Chil © Adriana Hoyos

¿Qué muebles podemos encontrar en esta colección?

La nueva colección Gem cuenta con todos los ambientes, empezando por dos salas, comedor y dormitorio. Lo interesante es que sacamos lo típico del diseño, jugando con ángulos y curvas para tener formas diferentes y así atrevernos a crear espacios un poco más versátiles.

¿De qué manera influyó el Art déco en la creación de las piezas?

Para está colección nos fijamos mucho en la arquitectura, por ejemplo, las columnas con detalles que interpretamos y agregamos a las patas de los muebles. Al ver las películas de la época nos cautivó la elegancia y la implementamos en esta nueva colección.

DORM CHIL © Adriana Hoyos

¿Cómo crees que influye la elección de determinados muebles en nuestra vida cotidiana?

Yo siempre pienso que los muebles no tienen que ser piezas sueltas en tu casa, tienen que pertenecer a ciertos sentimientos o ideas que quieres expresar. Siempre invitamos a los clientes a pensar de adentro hacia afuera, ¿qué es lo que quieren que se sienta? Y a partir de eso escoger las piezas, sin descuidar el confort e interpretando lo que más les gusta en los colores, las texturas y al personalizar los muebles. Esta es una gran herramienta que en Adriana Hoyos podemos hacer: personalizar para el uso y gusto personal.

¿Cómo se realizó la elección de colores para la colección?

Para esta colección implementamos dos nuevos tonos de madera que fueron inspirados por la joyería. Platinum y Ash Grey son los colores principales desde donde partimos para crear las gamas de colores, cuarcitas en blanco y negro, tiraderas de herrajes con tonos atrevidos, acabados metálicos en tono negro carbón.  

Presentamos esta colección como nosotros queremos que los clientes la palpen, pero cada persona puede personalizarla.

Comedor Vignette © Adriana Hoyos

¿Cómo funcionó la elección de los materiales y de qué manera Adriana Hoyos maneja la sustentabilidad?

Queríamos que una joya se vea reflejada en esta colección, por eso para la elección de materiales elegimos metales finos y acabados semi brillantes.

Tenemos presente la sustentabilidad, creemos que los muebles tienen que ser para toda una vida y que las piezas tienen que durar.  

Trabajamos con madera de bosques protegidos y con textiles con procesos limpios durante la fabricación. También nos interesa que la calidad, el confort y la ergonomía apoyen la parte sustentable desde un punto de vista social. Damos trabajo a muchas mujeres haciendo un ciclo mucho más grande que solo la parte ambiental.

Sala © Adriana Hoyos