De pequeña tuvo gran interés por el estudio de la arqueología, pero a medida que vio a su mamá trabajar, supo que el diseño de interiores sería su vida. “Veía y leía las revistas de diseño que mi mami tenía en su velador, me fascinaba acompañarla a decorar las casas y opinar como si tuviera experiencia alguna. Aunque tenía pasión por estudiar arqueología, siempre supe que la decoración iba a ser lo mío”.

De esta forma empezó a incursionar en el ámbito, mismo en el que aprendió a preocuparse por cada detalle para que su trabajo se convierta en un espacio inspirador, único y que logre mantenerse en el tiempo. “Nuestra marca toma especial cuidado en la calidad y la estética, pero marcando el ritmo de la personalidad hacia quienes va dirigido el proyecto”.

Al ser la diseñadora principal de la empresa y quien dedica mayor tiempo a la atención personalizada, definitivamente necesita mantener su fuente de inspiración despierta. Para esto nos cuenta: “Sin los viajes, la musa se me escapa”, ya que en ellos logra encontrarse con diversas culturas, piezas arquitectónicas, calles, museos, experiencias que le abren constantemente los ojos y preparan al corazón para mantener a su mente abierta y lista para proponer ideas que marcan la diferencia. “Estos viajes son, en su mayoría, a ferias internacionales de diseño y para adquirir piezas que ambientarán nuestras decoraciones.”

¿Cómo no regresar con ideas trascendentes?

Desde luego los viajes han dejado de ser un gasto y se han convertido en una inversión para la vida. Por ellos, CESA Design puede contar con piezas características. “Las hay y muchas. Hasta hace un par de años, las más icónicas eran las pintadas a mano, de diseños étnicos y arábigos; sin embargo, en este último tiempo, y siguiendo la tendencia mundial de diseño, nos hemos decantado por crear exquisitas piezas contemporáneas, especialmente de diseño OP Art”.

Solo debemos abrirnos al mundo, absorber aquello que nos toca e inspira para regresar a nuestras raíces y crear piezas inigualables que logren convertir espacios tradicionales, en unos extraordinarios.